Una decisión judicial está relacionada con el dictamen o resolución emitida por el poder judicial para resolver un caso determinado, esta decisión también se le conoce como sentencia, la cual busca solucionar cualquier litigio ya sea absolviendo o condenando al enjuiciado en aquellos procedimientos penales, o aceptando o ignorando lo solicitado por el demandante en los procedimientos civiles.
Cuando las decisiones o sentencias son consideradas de primera instancia, quiere decir que no está incluido de manera definitiva el proceso en cuestión, sino más bien entra en proceso de revisión y una vez que se acaben las instancias de apelación es cuando se traslada a la autoridad de cosa juzgada. Las decisiones judiciales originan diferentes consecuencias al momento de ser dictadas, algunas de ellas son las sentencias irreparables, es cuando lo decidido ya no será tratado de nuevo, aunque el procedimiento continúe.
El efecto de cosa juzgada, la cual nos señala que no existe impugnación que valga que permita la modificación de la misma, a través de ella se interpreta el respeto y acatamiento de la decisión tomada en el juicio. Y por último esta la declaración del derecho, la cual se encuentra vinculada con la distribución de las sentencias en constitutivas y declarativas.
La decisión o sentencia contradictoria, es aquella en donde el acusado está presente en el juicio, la decisión que se da en rebeldía es cuando se toma sin la presencia del acusado. Para llevar a cabo una decisión judicial es necesario cumplir con ciertos parámetros de tiempo, lugar y forma, ya que debe pronunciarse en un periodo de tiempo aceptable para la ejecución de las acciones tomadas por el juez, el cual tendrá una variación que va a depender del proceso en cuestión.